Digitalización de procesos: Sustitución de documentos y controles manuales por plataformas digitales que mejoran la gestión y el seguimiento de la producción.
Big Data y analítica: Almacenar y analizar grandes volúmenes de datos permite identificar patrones de consumo, optimizar inventarios y predecir tendencias de mercado.
Gemelos digitales: Réplicas virtuales de una máquina, un proceso o incluso una planta completa. Permiten simular situaciones, prever fallas y mejorar el rendimiento antes de aplicar cambios reales.
Ciberseguridad industrial: Con la digitalización, las fábricas están más expuestas a ciberataques. La ciberseguridad protege los datos, evita sabotajes y garantiza la continuidad de la producción.